General Motors reduce producción de vehículos eléctricos por eliminación de incentivos en EE. UU.

General Motors anuncia un ajuste a la baja en su producción de coches eléctricos. La decisión responde directamente a la eliminación de créditos fiscales federales en Estados Unidos, que finalizaron el 30 de septiembre. La compañía anticipa una contracción en la demanda a corto plazo. La medida afecta a plantas clave como Spring Hill, donde se ensambla el Cadillac Lyriq, y CAMI, dedicada a las furgonetas BrightDrop. La producción en Fairfax también está en pausa durante su reconversión para fabricar el nuevo Chevrolet Bolt. El contexto es una política gubernamental menos favorable que obliga a los fabricantes a reaccionar. Duncan Aldred, presidente de GM para Norteamérica, declaró que es casi una certeza que el mercado de eléctricos se reducirá temporalmente.

Advirtió que la compañía no sobreproducirá vehículos ante la esperada caída en las ventas. Las consecuencias inmediatas incluyen una reorientación de la capacidad productiva. A pesar del recorte, GM confía en poder aumentar su cuota de mercado en el segmento eléctrico a medio plazo. La empresa registró un récord de ventas en agosto, superando las 21. 000 unidades, impulsadas por consumidores que aprovecharon los últimos incentivos. Este patrón de compra acelerada antes del deadline también benefició a otros fabricantes como Ford.