Denuncian extorsión y tortura en penal de Santiaguito, Estado de México

Familiares de personas privadas de la libertad (PPLs) en el penal de Santiaguito, Almoloya de Juárez, denunciaron extorsión, tortura y violaciones a derechos humanos por parte del nuevo cuerpo de mando. Según testimonios, desde julio se imponen cobros excesivos para visitas, alimentos y servicios básicos, además de castigos físicos y traslados arbitrarios. Las víctimas señalan que estas prácticas han convertido el centro en un negocio en lugar de un espacio de reinserción. Los afectados responsabilizan directamente al jefe de vigilancia Daniel Camacho Liborio y otros funcionarios, acusándolos de corrupción y abuso de poder. Exigen la intervención de la presidenta Claudia Sheinbaum, ya que las autoridades estatales han ignorado sus denuncias. La Subsecretaría de Control Penitenciario no ha respondido a las acusaciones, lo que agrava la desconfianza en las instituciones.

Las familias detallaron que cada visita semanal cuesta hasta 1,500 pesos, con pagos obligatorios en cada etapa de ingreso al penal. Además, los reclusos deben pagar diariamente por agua, luz y hasta por el pase de lista, bajo amenaza de castigos como golpizas o aislamiento en celdas sin servicios. Los denunciantes advirtieron que los funcionarios los tienen identificados, lo que aumenta su vulnerabilidad. Ante la falta de respuestas, planean manifestarse frente al penal en los próximos días para visibilizar la crisis y exigir justicia. La situación refleja un patrón de violencia institucional en los CPRS del Estado de México, donde persisten redes de corrupción. Karina Villanueva, portavoz de los familiares, insistió en la urgencia de una investigación federal para evitar más violaciones a derechos humanos.