Embarazo y manzanilla: expertos aclaran dudas sobre su consumo seguro

La manzanilla, una de las infusiones más populares por sus propiedades digestivas y relajantes, genera dudas frecuentes entre las mujeres embarazadas. Según expertos en ginecología y obstetricia, su consumo no está prohibido pero debe realizarse con extrema precaución y moderación. A diferencia de otras hierbas como el ginseng o el aloe vera, la manzanilla no representa un riesgo significativo si se toma de forma controlada. El contexto de su consumo es crucial. Circulan mitos que vinculan la manzanilla con un posible aumento del riesgo de aborto debido a su efecto en la musculatura pélvica, pero estas afirmaciones carecen de respaldo científico sólido.

No obstante, los profesionales insisten en que cada embarazo es único y lo que es seguro para una persona podría no serlo para otra, haciendo indispensable la supervisión médica. Las consecuencias de un consumo inadecuado, aunque raras, podrían incluir toxicidad. Por ello, se recomienda limitar la ingesta a una taza diaria a partir del segundo trimestre, adquirir el producto de fuentes confiables para evitar contaminantes y nunca combinarla con otras infusiones sin aprobación médica. Consultar al ginecólogo o comadrona garantiza una orientación personalizada y segura.