Inundaciones en Texas dejan 82 muertos y decenas de desaparecidos, entre ellos 10 niñas

Las inundaciones en Texas han cobrado la vida de al menos 82 personas, mientras equipos de rescate buscan a decenas de desaparecidos, incluidas 10 niñas. El río Guadalupe se desbordó repentinamente, arrastrando campamentos y viviendas en condados como Kerr, donde se reportan 59 fallecidos, 21 de ellos menores. Autoridades locales y voluntarios trabajan sin descanso para encontrar sobrevivientes entre los escombros y zonas anegadas. El gobernador Greg Abbott calificó el evento como el peor desastre natural en la historia reciente de la región. El fenómeno meteorológico sorprendió a residentes y campistas a pesar de las advertencias del Servicio Meteorológico Nacional. Las lluvias intensas continuaron agravando la situación, dificultando las labores de rescate. Un trabajador del campamento Mystic logró salvar a un grupo de niñas al romper la ventana de una cabaña antes de que fuera arrastrada por la corriente.

Mientras tanto, drones y helicópteros se utilizan para localizar a víctimas atrapadas en árboles o áreas inaccesibles por carreteras destruidas. El presidente Donald Trump declaró la zona como catastrófica, liberando fondos federales para asistencia. Es una tragedia sin precedentes en un siglo, afirmó el mandatario, quien planea visitar Texas la próxima semana. Comunidades como Hunt y MoRanch evacuaron a tiempo, pero otras no tuvieron la misma suerte. Familiares de las víctimas, como Joyce Bandon —cuya última mensaje fue Nos está llevando el agua—, exigen respuestas sobre la falta de alertas más efectivas. Las autoridades advierten que el riesgo de nuevas inundaciones persiste.