SAT 2026: Conoce los 7 nuevos criterios oficiales que activarán una auditoría fiscal en México

El Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha dado a conocer los lineamientos oficiales que regirán la selección de contribuyentes para auditorías a partir de 2026. Este documento detalla las señales de riesgo fiscal específicas que los sistemas automatizados de la autoridad identificarán para iniciar un proceso de revisión.

El objetivo declarado es transparentar el proceso, fortalecer la recaudación y ofrecer mayor certidumbre jurídica, alejándose de revisiones masivas o aleatorias. Los hechos centrales giran en torno a siete criterios clave de alto riesgo.

Entre ellos destacan las operaciones con empresas factureras o nomineras, las pérdidas fiscales recurrentes sin sustento económico y las deducciones personales o empresariales infladas o sin documentación. Asimismo, el SAT focalizará en ingresos omitidos, el abuso de estímulos fiscales, las solicitudes de devolución sin respaldo y operaciones de comercio exterior con precios inusualmente bajos o proveedores extranjeros de riesgo.

Estos indicadores serán cruzados con información de facturación electrónica y otras instituciones.

El contexto de esta medida se enmarca en la necesidad de optimizar la recaudación ante más de 88 millones de contribuyentes activos. Los perfiles bajo mayor supervisión serán empresas con operaciones internacionales voluminosas, contribuyentes que usen esquemas agresivos de planeación fiscal, personas físicas con altos ingresos y discrepancias patrimoniales, y sectores económicos con históricos patrones de evasión.

La autoridad insiste en que un contribuyente con contabilidad ordenada y declaraciones congruentes tiene una probabilidad baja de ser auditado. Las consecuencias de estos nuevos lineamientos son claras para el mundo empresarial y profesional.

Por un lado, ofrecen un mapa de las prácticas a evitar, incentivando el cumplimiento estricto y la documentación impecable. Por otro, representan una advertencia firme contra la evasión organizada y las irregularidades contables.

Para reducir el riesgo de auditoría, el SAT recomienda mantener orden y consistencia en todas las declaraciones, verificar la validez de cada factura y proveedor, y asegurar que ingresos, egresos y operaciones reportadas coincidan plenamente con la realidad documentada..