Venezuela recibe a niños separados de sus padres en deportaciones desde Estados Unidos

Un grupo de 237 venezolanos deportados desde Estados Unidos llegó a Caracas, incluyendo siete niños que habían sido separados de sus padres. El gobierno de Nicolás Maduro denunció que estos menores fueron secuestrados al ser colocados en hogares de acogida tras la deportación de sus progenitores. Con este vuelo, ya son 8. 283 los repatriados bajo el acuerdo bilateral establecido en marzo. El ministro Diosdado Cabello aseguró que los niños recibirán atención médica y psicológica para superar el trauma de la separación. Esta situación se enmarca en las tensiones migratorias entre ambos países. Venezuela había exigido en junio la repatriación de 18 menores, cifra que luego aumentó a 31. Las autoridades venezolanas acusan a EE.

UU. de violar derechos humanos al dividir familias. El caso evoca críticas globales a las políticas de tolerancia cero de la administración Trump, que en 2018 provocó la separación de miles de niños migrantes en la frontera. Organizaciones humanitarias exigen garantías para evitar más casos similares. El arribo de los niños coincide con la repatriación de 252 venezolanos que estuvieron detenidos en una prisión de El Salvador. Testigos describieron condiciones inhumanas en el centro CECOT, denunciado por torturas y muertes. Analistas señalan que estas deportaciones reflejan la complejidad de la crisis migratoria venezolana, que ha desplazado a más de 7 millones de personas. Mientras el gobierno de Maduro promueve el retorno como un logro, opositores critican la falta de condiciones para reintegrar a los repatriados.