México es el segundo país más afectado por phishing en Latinoamérica

En México, el phishing se ha convertido en una amenaza crítica, con más de 119 millones de intentos bloqueados en 2024. Este fraude digital, que suplanta identidades de bancos y servicios legítimos, ha afectado a 13. 5 millones de personas, según The Competitive Intelligence Unit. El 23% de las víctimas perdió dinero, con un promedio de $8,750 pesos por caso, mientras que el 61. 5% comprometió contraseñas y el 38. 5% reveló información personal sensible. Las cifras reflejan un aumento del 40% en fraudes cibernéticos desde 2018, superando ampliamente los delitos tradicionales. El impacto del phishing va más allá de las pérdidas económicas. Robos de identidad, extorsiones y acceso a cuentas bancarias son consecuencias frecuentes. A pesar de que muchos usuarios evitan

enlaces sospechosos o verifican remitentes, solo el 18. 6% utiliza software de seguridad. Peor aún, el 17. 7% no toma precauciones, dejando puertas abiertas a los cibercriminales. Las pequeñas y medianas empresas también son blancos frecuentes: el 40% de las PyMEs en Latinoamérica ha sufrido fraudes digitales, según estudios recientes. Ante esta crisis, expertos exigen leyes específicas que tipifiquen el phishing como delito y promuevan medidas preventivas. Bloquear números y correos fraudulentos automáticamente, junto con campañas de educación digital, son pasos urgentes. La colaboración entre autoridades, empresas tecnológicas y usuarios es clave para reducir los riesgos. Sin una estrategia integral, México seguirá siendo un objetivo prioritario para los ciberatacantes, erosionando la confianza en la economía digital y la seguridad en línea.